Ya es 29 de abril de 2003 y el mundo sigue, al igual que yo, en medio de una vorágine de acontecimientos...
Bajo la consigna de: ¡todo tiempo pasado fue mejor!, miles de argentinos piden el regreso de Carlos Menem a la Casa Rosada, ¡ahora con nueva familia!. El aparato menemista ha creado, en pocos meses, un discurso que lo absuelve de cualquier responsabilidad en la crisis económica que los acosa desde diciembre de 2001. Por lo menos un 25% de los argentinos que acudieron a las urnas el pasado domingo así parecen creerlo (unos 5 millones de ciudadanos argentinos, según cálculos míos).
La resistencia social, organizada a fuerza de corralitos y hambre, se aminora; los que aún enfrentan al Estado, son sometidos a una dosis de brutal represión. La recuperación económica es prometida si hay democracia, el consenso de Washington ofrece financiar la crisis si se ésta se concreta.
Mientras en México el crédito garantiza supervivencia; la economía, en voz de prominentes funcionarios y analistas, promete estabilidad y crecimiento lento... pero seguro.
La guerra sigue perdiendo raiting, y ahora hay que buscar la nota. Por cierto ¿qué sucedió con el marine que hizo estallar una bomba en su trinchera?, ¿Cómo diablos se llama el nuevo virrey de la Bagdad ocupada?, ¿la fiebre asiática, acaso es una de las armas bioterroristas?
Las cosas van
... sin embargo
los espacios nos recuerdan
y sin embargo
sigo aún...
Cada vez que llego a mi casa me doy cuenta lo que han hecho con el estadio de béisbol del Seguro Social. He visto el proceso de su desmantelamiento: iniciaron quitando los paneles de reflectores para después quitar su estructura metálica, así, en poco más de un mes han convertido ese lugar en piedras y deshechos.
Los obreros después de esa tarea, podrán dar paso a la construcción de un centro comercial, uno más... Que divertido era ir a un clásico Diablos vs. Tigres, siempre sucedían muy buenas anécdotas. Ahora solo falta que quieran que el panteón francés sea trasladado “con todos sus restos” a otra zona y armarnos un parque de diversiones o un antro gótico.
